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Tan sólo lawfare.
Correístas y zurdos surtidos insisten que "Bananera Noboa debe 93 millones de dólares". Afirmo que no existe tal deuda, y por ello propongo las siguientes razones.
La evidencia de la "deuda" consta en búsquedas de las bases de datos del SRI, que arrojan este resultado:
Son seis deudas desde 2006, que consisten en $30 millones de capital y casi $66 millones de intereses y multas.
Recordemos que en el año 2005 se encontraba en el poder Alfredo Palacio, vicepresidente de Lucio, quien había ganado a Álvaro Noboa en las elecciones de 2003, y contra quienes este último se había convertido en su principal opositor. Fácilmente podemos colegir que una glosa tributaria totalmente desproporcionada [V.] a su principal adversario político, lo cual podría ser signo de lawfare; máxime cuando en el año de marras Noboa no fue el mayor exportador, y sin embargo le aplican un ajuste cien veces mayor al del mayor exportador de ese año [V.]; más aún si el precio al que el SRI hace el ajuste, implicaría que el banano de Noboa hubiera quedado fuera del mercado, por valer el doble [V.].
Efectivamente la mayor exportadora de ese año, Dole, pagó $700k en impuestos, y Noboa $260k [V.], [V.]. ¿Pero en "reajuste" esa cifra crece 300 veces?, sin haber sido la mayor exportadora de banano de ese año, insisto. ¿No es más plausible la teoría del lawfare?
Esto ocurre en el contexto de un gobierno frágil, del vicepresidente de un presidente impopular, que fácilmente habrá querido ganar puntos y reafirmarse "atacando al político ricachón", enemigo más visible en ese momento. Asimismo debemos tener en cuenta el contexto de la época, cuando la "marea rosada" del socialismo del siglo XXI iba en ascenso en toda latinoamérica, así que el pueblo no vería mal un sablazo al más rico, que convenientemente era el adversario político más visible.
Curiosamente, ese "reajuste" tributario ocurre precisamente en el gobierno de Palacio, donde Correa fue superministro vedette de economía durante unos meses… ¿Sería plausible atribuirle la "mano negra" que incrementó cientos de veces el tributo a pagar?, más aún siendo consciente de su estrella en ascenso —durante toda su vida soñó con el poder— y sabiendo que podía dar un ataque "preemptivo" a quien seguro sería su mayor adversario?
La hipótesis cobra fuerza cuando es sabido que los actos del poder político gozan de "presunción de legitimidad", es decir, es el afectado quien debe demostrar su ilegitimidad y defenderse, incluso pagando para poder interrumpir su ejecución. ¡Es la herramienta de lawfare perfecta!, máxime cuando en unos pocos años el Machi metería las manos en la justicia, blindando sus actuaciones en el poder.
Curiosamente los vaivenes de la política son dejados de lado unos años después, cuando aparecen Lucio y Alvarito juntos en el matrimonio del actual presidente [V.] junto a Abdalá y Omar Quintana. Prueba de la magnanimidad de Alvarito y que considera que hay cosas más importantes que el dinero y la política; ¿alguien se imagina al Machi invitando a Lenin, Lasso o Daniel al matrimonio de Miguelito? Inconcebible…
Los argumentos son económicamente plausibles; tanto es así, que Noboa ganó en el Tribunal Fiscal en 2010 [V.] pero al año siguiente Correa "metió las manos en la justicia" y es sabido que desde ahí empezó a ganar todos los juicios…
De entrada, objetamos que los zurdos, que suelen oponerse idológicamente a los intereses y al "rentismo y usura", los acepten cuando es el estado quien los cobrará. Doble rasero.
Segundo, la incautación de La Clementina ocurre en 2013, por una deuda de ~$100 millones [V.], otros citan ~90 millones. Pero la deuda de 2006 en libros del SRI vemos que es de $15 millones; a un interés del 15% anual por seis años (es decir, a fines de 2012, pues en 2013 se incauta), daría un total de ~$37M, NO los 101 millones que dice el SRI ya en esa época. Ése es un problema constante de este caso: la "danza de cifras" que varían enormemente.
Ni siquiera sumando las otras deudas (liquidando intereses hasta 2012) llegamos a esas cifras: la del 2007 por $4,7 millones se duplicaría a $8,6M, y la de 2008 llegaría a $14,3M, sumando en total ~$62 millones, muy lejos de los $100M denunciados por funcionarios del SRI. Insistimos, basándonos en registros del propio SRI.
Lo peor del caso, es que luego de incautada, SRI "vendió" la hacienda a los trabajadores —con crédito del propio estado, que luego no pagarían; pésimo negocio— por casi $79M, es decir, más del monto realista de deuda que hemos hablado, y SRI cobró [V.] pero no borró la deuda de libros, como debió haber hecho. Si debería quedar un "vuelto" a favor de Noboa, ya es cuestión de discutirse; pero indudablemente se debió dar de baja por lo menos la mayor parte de esa deuda, lo que no ha ocurrido.
La pésima administración estatal de la hacienda, con sospechas de tráfico de drogas, peculado, depreciación y abandono de la producción, fraude y deuda al IESS de los trabajadores; que ilegalmente se incautaron y deforestaron otras haciendas colindantes que no eran parte del litigio [V.], etc., etc. [V.], cae fuera del ámbito de este artículo.
Recapitulando: hay una "danza de millones" en todo este asunto; es difícil ponerse de acuerdo en las cifras correctas, y más aún cuando todo aparenta haber salido de lawfare. Correa reactiva una glosa "dormida" desde la época de Lucio, y la utiliza para herir a su principal adversario político; y no contento con ello, incluso trató de meterlo preso, por lo cual Alvarito tuvo que exiliarse [V.].
Quizá sí operó la "compensación" de la "venta" de Clementina, y por eso la deuda original cercana a ~$90M en libros del SRI de 2006, hoy aparece como "sólo" de $15M (de capital). De todas formas el principio permanece: los montos son totalmente implausibles, y toda violencia estatal ejercida desde entonces es simplemente es una agresión injusta, que no da lugar a derechos. Y ya hay demasiadas moving parts en esta mala trama y está superando mi ancho de banda, jeje, así que vamos a cerrar pronto el artículo.
Con actuaciones así, no es de extrañarse que seamos considerado "infierno fiscal" por inversionistas extranjeros.
A esta aburrida y psicopática trama de casi dos décadas hay que añadirle dos matices más. Uno de ellos, es que pese a que los funcionarios del SRI intimaban con sorna a Noboa que se acerque a conversar "con la chequera en la mano" [V.], Noboa afirma que antes del remate solicitó una facilidad de pago para poder cancelar los impuestos que consideraba injustos [V.] pero le fue negada instantáneamente, porque la meta del gobierno era hacerse con La Clementina.
Por otra parte, desde la incautación el gobierno de Correa permaneció en el poder cuatro años más, y no realizó ninguna gestión de cobro adicional por el "resto" de decenas de millones de dólares que supuestamente quedaban de deuda, y que aun hoy aparecen en los libros del SRI. ¿Podemos acusar de negligencia en el cobro de impuestos al pdte. Correa, que nada disfrutaba más que el llanto de los ricos cuando les confiscaba propiedades y empresas? (Recordemos las incautaciones a los Isaías) Claro que no; simplemente se guardó esa "carta bajo la manga" para una futura ocasión, más aún sabiendo que su adversario ya había salido al exilio: cuando volviera, podría nuevamente ponerlo en jaque por esas decenas de millones de deuda.
Gobiernos subsiguientes se encontraron con esa enorme deuda que no había sido dado de baja, y peor aún que no podía darse de baja, ya que se encontraba "firme" y sin posibilidades de recursos legales. ¿Qué hacer? Los gobiernos subsiguientes no eran ideológicamente opuestos al libre mercado, y los dos últimos pertenecen a la élite productora, que durante más de una década puso sus barbas en remojo al ver cómo era tratado Noboa.
¿Qué hacer entonces? Como dicen los gringos, let sleeping dogs lie, lo mejor era no hacer nada… Cualquier gestión de cobro más allá del postureo ante cámaras seguro hubiera asustado a los mercados e inversionistas. Así que ahí sigue esa "deuda" incobrable en libros: no se la puede eliminar, no se la puede cobrar sin violencia injusta.
Es asimismo probable que la empresa en litigio esté inactiva, o con mínima actividad; así que la deuda vendría a ser como otras deudas antiguas, incluso algunas desde la crisis de 1998, que constan en libros del SRI, pero las empresas ya han quebrado hace décadas y/o los deudores originales incluso han fallecido.
Adicionalmente Noboa pudo haber alegado prescripción de la acción de cobro, sabido que la administración tiene 5 años para cobrar, y esta es una "deuda" de hechos ocurridos hace veinte, y más allá del postureo de las autoridades subsiguientes a lo largo de los años, dudo que haya habido alguna acción de cobro que interrumpiera la prescripción. Mas sin embargo supongo que Noboa dudaría de alegarla en cortes; no sólo porque probablemente no hallaría justicia, sino también porque políticamente sería poco digestible el "millonario que no quiere pagar impuestos, pero desea acceder al poder". Así es la política.
En el caso de los gobiernos subsiguientes, su "inacción" de cobro merece unas palabras. ¿Qué hacer con una deuda a todas luces injusta, pero que sin embargo consta en libros?, y peor aún cuando afecta a un miembro de tu clase social, me imagino que habrá cavilado el pdte. Lasso. Emplear violencia estatal para cobrarla —por ejemplo, con más incautaciones y remates— seguro habría enviado señales negativas a los mercados internacionales, y ahuyentado muchos más capitales que los que se recaudarían. Así que sólo queda el "postureo" ante medios: "sí, haremos las gestiones de cobro, no nos hemos olvidado de eso…", y poco más, sabiendo que la administración tributaria no puede declarar prescrita la deuda de oficio.
En conclusión: no hay ninguna deuda de Noboa; más que una “espada de Damocles” en los libros del SRI que creó Alfredo Palacio y se tenía reservada el Machi, ambos para tener en jaque a Alvarito, su adversario entonces. No hay forma de eliminarla —porque acudir a las cortes sería mala publicidad, “el niño rico que no desea pagar impuestos”— así que ahí se quedará junto con otras deudas de hace décadas…
Cómo son las cosas: ¡al día siguiente de publicado este artículo, cuentas correístas en X "dan la voz de alarma" que la deuda de Noboa se reduce! (se ve que monitorean la deuda a diario) Nuevamente, como "las acciones de la administración tributaria se presumen legítimas", debe admitirse que fue a cambio de millonarios pagos de capital, para poder beneficiarse de exenciones de intereses y multas; lo cual también ocurrió durante el correísmo en 2015, por cierto, con una ley orgánica ad-hoc.